La estufa Patsari, cuyo antecedente es la estufa Lorena, es una tecnología propia que es resultado de un proceso de innovación y desarrollo tecnológico en el que han participado el Instituto de Ingeniería y el Centro de Investigaciones en Ecosistemas (CIEco) de la UNAM, junto con el Grupo Interdisciplinario de Tecnología Rural Apropiada, A.C. (GIRA), en coordinación con la Universidad de California, así como técnicos, promotores y amas de casa, todo lo cual asegura tener una estufa eficiente adaptada localmente. Además, en colaboración con otras instituciones, como el Instituto Nacional de Ecología (INE) y el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), se han realizado minuciosos estudios para documentar los beneficios e impactos que tiene esta nueva tecnología en la salud, en el ambiente y en las familias. El Proyecto Patsari fue propuesto en 2003 y su objetivo principal era integrar innovaciones tecnológicas que permitieran mejorar la quema de la leña a través de una cámara de combustión que separa y aísla los químicos que producen toxicidad. Patsari es una palabra que en lengua purépecha significa “la que guarda”, haciendo referencia a que guarda el calor, y a que conserva la salud y cuida los bosques.
El interior de la Patsari está hecho de una mezcla de barro, arena y cemento; el exterior puede ser de la misma mezcla o de ladrillo rojo; y a diferencia de la estufa Lorena, está orientada a una difusión en mayor escala. Por esta razón se construye con un molde metálico que garantiza que las medidas interiores de la estufa sean correctas, y de esta manera se asegura que la estufa funcione adecuadamente, además de facilitar su construcción. Cuenta con cámaras de combustión, hornillas secundarias y túneles mejorados para mayor eficiencia, y permite una mejor protección de la salud, por medio de comales que quedan sellados evitando fugas de humo.
El calentamiento de las hornillas secundarias se realiza mediante túneles, los cuales conducen los gases de combustión hacia dichas hornillas. Las hornillas secundarias cuentan con bafles o deflectores que mejoran la transferencia de calor de los gases hacia el comal. Estas hornillas están diseñadas para tareas de menor demanda energética, tales como mantener calientes los alimentos previamente preparados o calentar agua.
La estufa Patsari permite reducir en un 60 % el consumo de leña, y así ayuda a la conservación de los bosques. Reduce en un 95 % la contaminación del aire interior de los hogares y, por lo tanto, permite evitar el riesgo de contraer enfermedades respiratorias, de ojos, quemaduras, enfriamientos, etc. Se ahorra tiempo y dinero porque, como se reduce el consumo de leña, se destina menos tiempo a la recolección o dinero para comprarla. Se construye con materiales locales, como tierra y arena. El costo de la estufa es bajo, ya que la mayoría de los materiales se encuentran en la comunidad a la mano y sin ningún costo. Su construcción es sencilla y rápida (aproximadamente una hora y media). Tiene una duración de hasta 10 años, si se hace buen uso de ella y se le da mantenimiento. Es fácil de usar, ya que, una vez que prende, un trozo de leña es suficiente para que funcione bien.
Fuentes: